“No hay suficiente trabajo para llenar la jornada de 50 parlamentarios y sus asistentes (13 personas de libre designación que apoyan la labor parlamentaria), a pesar del incremento de actividad que se ha producido en la última legislatura”. Ésta es una de las conclusiones del tercer informe que Institución Futuro ha elaborado sobre la Cámara foral.
En anteriores estudios, Institución Futuro se centró en el trabajo y la transparencia del Parlamento, así como en su productividad legislativa. En el que acaba de hacer público se estudia el trabajo de cada parlamentario y concluye que el número es excesivo para la actividad y carga de trabajo existente.
La Cámara navarra se profesionalizó en el año 2007 y en la actualidad 40 de sus 50 parlamentarios han optado por una dedicación absoluta, 5 tienen dedicación parcial y sólo 3 reciben dietas como compensación a su actividad parlamentaria.
Institución Futuro advierte la existencia de una gran diferencia en la cantidad de horas de trabajo de unos parlamentarios y otros. Los partidos pequeños, añade, como PP, I-E y Geroa Bai son los que soportan mayor carga de trabajo junto a algunos parlamentarios concretos de los partidos mayores.
Las diferencias en el trabajo de cada parlamentario también se aprecian en las intervenciones, que en 2013, por ejemplo, el número varió entre 2 y 155. Institución Futuro propone repartir mejor el trabajo entre los parlamentarios o ajustar el número de parlamentarios al trabajo existente. Y también aconseja a los propios partidos que tengan en cuenta el trabajo que realiza cada uno de sus parlamentarios a la hora de confeccionar las listas electorales.
Formación y profesiones
El trabajo realizado por Institución Futuro tiene en cuenta también los perfiles profesionales de los parlamentarios. Así, indica que 9 de ellos son titulados en Ciencias, 8 en Derecho, 7 en Magisterio, 7 en Filosofía y Letras, 6 en Economía y Empresa, 2 en Ingeniería y Arquitectura, 2 en Comunicación, 2 tienen Formación Profesional y 1 Bachillerato. En seis casos se carece de información académica.
El estudio propone que la Cámara foral ponga a disposición de los ciudadanos los currículum de todos los parlamentarios y que la institución legislativa tenga en cuenta los estudios y conocimientos de cada uno de ellos a la hora de asignarle funciones. Advierte que la labor de legislar es compleja y sin embargo la mayoría de los parlamentarios no tiene formación o conocimientos jurídicos “Creemos que esta formación debería ser obligada al comienzo de cada legislatura para los nuevos entrantes”, expone Institución Futuro.