La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, estuvo en Pamplona hace pocos días en un ciclo de conferencias organizado por Institución Futuro para hablar sobre la política económica que está llevando a cabo en su región. Dado el carácter descentralizado de España el margen de maniobra de las CCAA es elevado y nos parece interesante conocer las diferentes estrategias explicadas por sus máximos responsables: sus Presidentes autonómicos. En la jornada quedó patente que no todas las políticas económicas obtienen los mismos resultados y que para cada momento se hace recomendable una política determinada.
Algunos de los temas que se expusieron fueron los siguientes. Madrid presenta el nivel más bajo de gasto público respecto al PIB entre todas las CCAA, lo que indica un menor peso de la Administración. Representa un 10%, cuando el gasto medio en el conjunto de las CCAA se acerca al 20%. Navarra, con un 23%, es la segunda región con más gasto público después de Extremadura, un gasto público que año tras año viene aumentando. Los menores niveles de gasto observados en Madrid implican un menor esfuerzo fiscal para los contribuyentes.
Asimismo, Madrid registra la deuda más baja de toda España. Su endeudamiento es del 14,8% en relación a su PIB, 11 puntos por debajo de la media del resto de las CCAA. Navarra es la segunda con 15,2%. Ayuso defendió de manera insistente que la verdadera eficacia del gasto público no consiste en gastar más, sino en gastar mejor, obteniendo el máximo resultado de cada euro público invertido. La puesta en práctica de la temida “austeridad”, planteada por la presidenta en su sesión de investidura, se demostró en que la primera medida adoptada al llegar a la presidencia fue la de reducir el tamaño del Ejecutivo, que pasó de tener 13 consejerías a 9 (prescindiendo de las vicepresidencias). Recientemente ha anunciado que va a reducir el tamaño de la Asamblea de Madrid, que pasará de 136 a 91 diputados.
Madrid ha llevado a cabo el tratamiento de la fiscalidad de forma diferente del resto de CCAA. Desde 2004 vienen bajando IRPF, donaciones y sucesiones, impuesto sobre transmisiones onerosas… Este año se ha aplicado la mayor bajada del IRPF y ha renunciado a todos los impuestos propios. Su Gabinete ha dado luz verde al proyecto de Ley de Defensa de la Autonomía Financiera con el objetivo de blindar su política económica y fiscal de la que ultima el Gobierno de España y que lleva aparejada una subida de impuestos generalizada a los ciudadanos. Con ello Madrid se ha puesto a la cabeza en el Ranking Autonómico de Competitividad Fiscal con la menor presión fiscal normativa (en Navarra seguimos perdiendo puestos y ya somos la 14). Esta política fiscal ha permitido que en las dos últimas décadas una familia de clase media se haya ahorrado más de 20.000 euros en impuestos.
Tal y como explicó la presidenta, Madrid ha puesto en marcha la Ley de Mercado Abierto, con la que cualquier entidad que ya esté legalmente establecida en otra comunidad podrá hacerlo libremente en Madrid de forma automática. La hiperregulación y la proliferación de normas por las CCAA segmentan los mercados, elevan los costes de transacción, dificultan la movilidad, discriminan y, en definitiva, lastran el crecimiento económico y la generación de empleo. La desregulación de la vivienda, entendida como simplificación de la burocracia asociada a la rehabilitación, o la nueva Ley de Suelo, que flexibiliza los cambios de uso y elimina también burocracia, van en la misma dirección.
Resulta constructivo confrontar las medidas mencionadas con sus resultados. En cuanto al crecimiento económico, el PIB madrileño aumentó más casi dos puntos que la media nacional y el PIB per cápita es el mayor de toda España (34.700 euros frente a los 31.300 de Navarra). No es de extrañar, por tanto, que el paro en la capital se esté reduciendo más y a mayor ritmo que la media nacional. Madrid ha recuperado todo el empleo perdido por la pandemia y hay más población que nunca trabajando en Madrid. Más del 81% con contratos indefinidos, frente al 74% de media en España.
La capital es el tercer destino de inversión más importante de Europa. El 75% de la inversión extranjera que recibe nuestro país lo acapara Madrid. Casi 300 empresas se fueron de Cataluña en 2021, mientras cerca de 600 llegaron a Madrid y un 45% de las sociedades que dejaron Cataluña se fueron a Madrid.
Todo ello ha llevado a que la población de Madrid haya crecido el doble que la media española en los últimos 40 años. Pensando en una pirámide de población que envejece, el reemplazo de las personas en el mercado laboral va a resultar siendo un problema si no se crece en población. Allí todo el mundo es bien recibido y se le facilita la llegada, en contra de otras comunidades que dificultan su incorporación. En definitiva, la máxima que rige la política económica de Ayuso y que de manera tan clara defendió en Pamplona es la de la libertad por un lado, y la del aprovechamiento máximo del dinero público por otro. Lo que está claro es que algo se estará haciendo bien. De ello nos tocaría aprender.a imposición ruina y fracaso.
José María Aracama Yoldi Presidente del think tank Institución Futuro