Hace unas semanas conocíamos la noticia de que UPN apoyará los Presupuestos Generales del Estado para este año. El acuerdo firmado entre el líder regionalista Javier Esparza, y el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, es digno de análisis por todo lo conseguido para la Comunidad Foral y, por ende, para los navarros.
El aspecto que más se ha publicitado ha sido el de los 80 millones de euros destinados a la incorporación de entre 800 y 1.000 empleados de menos de 30 años a la factoría Volkswagen de Landaben entre 2018 y 2022. Esa cifra puede llegar a suponer el 16% del paro juvenil de región, un dato a tener en cuenta. Este hecho va a ayudar, y mucho, a desatascar la negociación del convenio de la planta, en punto muerto debido precisamente a la falta de avances en materia de rejuvenecimiento de la plantilla. Cabe destacar que precisamente fue UGT quien tuvo la idea de incluir en el acuerdo presupuestario el citado plan de rejuvenecimiento, que incluirá también la prejubilación de 800 veteranos. Teniendo en cuenta que el empleo y los problemas económicos son las principales preocupaciones de los navarros, esta medida parece más que apropiada.
Otro aspecto fundamental para el crecimiento socioeconómico de Navarra son las infraestructuras. Desde Institución Futuro venimos recordando de manera periódica su importancia para la mejora de la competitividad regional, ya de por sí muy limitada. Unas infraestructuras buenas, modernas y efectivas ayudarán a la eficiencia económica y la equidad territorial, potenciarán la economía local y facilitarán el acceso a mercados y recursos.
Pues bien, el Gobierno Central se ha comprometido a invertir más de 2.500 millones de euros desde 2018 hasta 2024 en el Tren de Alta Velocidad de Navarra, con el propósito de que la línea Zaragoza-Pamplona Y vasca esté terminada para esa fecha. Merece la pena recordar, una vez más, que el coste de esta infraestructura corre a cargo de la Administración Central, no del Gobierno de Navarra. Su importancia para la competitividad de la región, la creación de puestos de trabajo, la reducción de tráfico por carretera y de emisiones es innegable.
El compromiso económico para avanzar en la construcción de la futura autovía a Madrid -20 millones entre 2018 y 2019-, la gratuidad de la AP-15 para quienes realicen el viaje de ida y vuelta en el mismo día o la ampliación de un nuevo carril en la N121-A a Francia para dinamizar el norte de Navarra son otras obras que, a todas luces, van a revertir en el bienestar, y también en el bolsillo, de los navarros.
Asimismo, se ha conseguido financiación para mejorar equipamientos deportivos de diversos municipios navarros y para el mantenimiento de cauces de ríos contra inundaciones. También se van a poder atender determinadas necesidades en materia de personal que presta servicios en la Comunidad Foral, como son el incremento de plazas de examinadores de tráfico, la jubilación de los funcionarios integrados en los cuerpos docentes dependientes de Navarra o el reconocimiento de coeficientes reductores de la edad de jubilación a la Policía Foral de Navarra.
En total, se han pactado 54 millones de euros para Navarra para este año y 2.667 millones de euros desde 2018 a 2024. Para algunos temas, la pelota está ahora en el tejado del actual Gobierno Foral, que deberá concretar, entre otros, aspectos como la materialización de la gratuidad de la AP-15.
Ojalá todos los navarros puedan, en primer lugar, conocer el contenido íntegro del acuerdo entre UPN y PP y la cuantía del mismo y, en segundo lugar, sepan valorar positivamente el avance que este acuerdo supone para Navarra.