Navarra Confidencial, 13 de noviembre de 2017

El Instituto de Estadística de Navarra ofrece regularmente los resultados del Indicador de Clima Industrial (ICI), que mide la confianza de nuestras empresas industriales. El ICI resulta de promediar los siguientes indicadores de opinión empresarial: la cartera de pedidos, la existencia de productos terminados y la tendencia de la producción.

Teniendo en cuenta que el industrial es el sector estratégico por antonomasia de la Comunidad Foral, este indicador resulta de suma importancia. Lamentablemente, el Clima Industrial se viene deteriorando desde pocos meses después de que llegara al poder el cuatripartito.

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Indicador de clima industrial. Institución Futuro

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La gráfica anterior, recién publicada y correspondiente a los datos del mes de septiembre, resulta especialmente preocupante por dos factores. En primer lugar porque, como analizábamos, el Clima Industrial se viene deteriorando desde hace muchos meses y ahora mismo se encuentra muy por debajo de lo que estaba a comienzos de 2016. En segundo lugar porque ahora mismo nos encontramos con que el indicador en Navarra está por debajo de los niveles de este indicador tanto en el conjunto de España como respecto a la UE. No estamos yendo mal porque a todo el mundo le va mal, sino que nos está yendo mal cuando a todo el mundo le va bien, hemos bajado cuando los demás subían y hemos perdido toda la ventaja que teníamos respecto a ellos.

Por si fuera poco, pese que al menos nuestro contexto económico es positivo, añadido a esta situación tenemos otro doble problema: que el gobierno niega la existencia del problema y que el cuatripartito acaba de anunciar una nueva subida generalizada de impuestos, también para las empresas. Las empresas, tras esta subida que se suma a la anterior en un plazo muy breve y que se produce, además, mientras nuestro entorno baja impuestos a las empresas, lógicamente se preguntan si con este gobierno en otro breve plazo de tiempo vendrá otra subida, y luego otra y después otra. La duda no ayuda a que las empresas decidan invertir y desarrollarse en Navarra.

Desgraciadamente resulta preciso insistir en que tenemos varios indicadores empresariales ofreciendo desde hace tiempo señales de alarma. Sería temerario despreciar sostenidamente estas señales de alarma porque, cuando el daño está hecho y los efectos se vuelven apreciables a simple vista, ya es demasiado tarde para poner remedio. Es decir, las cosas suelen requerir un desarrollo en el tiempo para que se produzca un deterioro, pero después también hace falta un desarrollo en el tiempo para que se produzca una mejora. Y como suele pasar con todo, además, resulta mucho más fácil perder la confianza que recuperarla.

Institución Futuro
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